La lipoescultura te ayuda a deshacerte de esa grasa localizada sobrante
Haces deporte, comes sano y no te atiborras comiendo pasteles o derivados; entonces, ¿a qué se debe esa grasa que se acumula en tu abdomen? O en cualquier otra parte del cuerpo… Indagas sobre qué alimentos te ayudan a perder ese kilito de más localizado y centras tu entrenamiento en afinar esa zona (abdominales, por ejemplo), pero sigue ahí y parece que no hubiera forma de deshacerse de él. ¿Existe alguna solución?
Gracias a las técnicas de liposucción, hoy puedes estar más cerca de esa figura armónica que te mereces por el esfuerzo que realizas día a día, pero que, al igual que en muchos casos, tu condición genética no te permite (ojo, este método no te ayudará a eliminar la celulitis).
La liposucción, también llamada lipoescultura, es una técnica que consiste en la extracción de esa acumulación de grasa localizada con la ayuda de una cánula conectada a una máquina de vacío. Los muslos, las caderas, los glúteos, el abdomen, la cintura, la zona pectoral, los tobillos y el cuello son algunas de las zonas susceptibles de recibir este tratamiento estético.
Pero, ¡atención! Este procedimiento no está destinado a personas con problemas de sobrepeso. No se trata de un sustituto de una correcta alimentación y unos adecuados hábitos deportivos, sino que su propósito es la corrección puntual de determinadas zonas del cuerpo a fin de modelar tu figura, con la consiguiente mejora de tu apariencia y, por tanto, de la imagen que tienes de ti.
Características de la intervención
La técnica de liposucción tiene una duración aproximada de una a dos horas y se realiza con anestesia local, epidural o general (Siempre, sin excepción, ha de realizarse en un quirófano y en unas condiciones clínicas autorizadas que garanticen su seguridad).
La cánula se introduce a través de pequeñas incisiones (de 3 a 4 milímetros y, dentro de lo posible, en zonas poco visibles) por donde se va extrayendo el exceso de grasa. Tras una sola sesión -y con la recomendación de permanecer 24 horas en la clínica si se utiliza anestesia general- se aplicará una compresa que ayudará a la piel a reajustarse a su nueva silueta.
Cuidados posteriores y resultados
Una vez realizada la operación, es habitual que se presenten hematomas e inflamación, pero gracias a la ayuda de una faja compresora, estos efectos irán desapareciendo poco a poco, aproximadamente en tres o cuatro semanas. Para considerar que el proceso ha finalizado por completo, con el consiguiente borrado de las posibles cicatrices, se necesitarán aproximadamente seis meses.
Asimismo, durante las primeras semanas se recomienda no bañarse, sino darse duchas rápidas con agua templada. También se deben evitar los esfuerzos, la exposición al sol y los baños sauna. Si se continúa con una dieta sana y la realización de ejercicio físico, los resultados son permanentes.
Si estás interesada en conocer más acerca de este u otros procedimientos quirúrgicos, por favor ponte en contacto con las oficinas del Dr. Troell. Podrás obtener una Consulta Privada Gratis.
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